En Ciudad de México, donde el concreto arde y el caos vibra, Kenzo Parfums trajo una pausa. Así se vivió la presentación de L’Eau Pure, su nuevo perfume unisex. En su evento en la ciudad, la Maison nos sumergió en una experiencia sensorial donde el lujo no brilló por exceso, sino por coherencia. Ingredientes reciclados, moléculas acuáticas, lavanda que flota y un frasco que no soólo embellece, también conversa.
La frescura se volvió manifiesto
Creada por Daphné Bugey, L’Eau Pure reinventa el concepto de frescura con una fórmula que respira con el planeta. Desde los cítricos italianos extraídos en frío hasta la lavanda blanca de Provenza, cada ingrediente se siente vivo. Pero el giro más interesante viene con Aquozone, una molécula desarrollada mediante procesos circulares que huele —literalmente— a agua. Otorgándonos esa sensación limpia, líquida y luminosa que solo la naturaleza logra.
Perfume con propósito: el océano como musa
L’Eau Pure nace en la Polinesia Francesa, pero su impacto busca resonar en todo el planeta. En colaboración con Coral Gardeners, Kenzo ya ha financiado la plantación de 11,000 corales y la formación de nuevas generaciones de guardianes marinos. La meta para 2028: restaurar más de 5,000 m² de arrecifes y sembrar 23,000 corales más. Este compromiso se sintió latente en la campaña global —protagonizada por Juanpa Zurita, Lily y Mabel Chee—, que nos recuerda que el lujo también puede ser activismo.
CDMX se convirtió en un oasis multisensorial
La presentación en México fue todo menos predecible. Un espacio transformado, agua corriendo, luz líquida, aromas suspendidos. Proyecciones del viaje inmersivo a Moorea, materiales reciclables, y ese frasco cristalino —hecho 100% de vidrio, con tapa incluida— que encapsula el alma del perfume. Entre creadores, prensa y comunidad, destacaron talentos mexicanos como Juanpa Zurita y Natalia Sosa, la emblemática Glinda de Wicked México, quienes acompañaron el mensaje claro de Kenzo: la belleza se transforma cuando es consciente. Y nos invita a formar parte de esa ola.
