Si el mar pudiera transformarse en joyas, se vería como la colección Blue Book 2025: Sea of Wonder de Tiffany & Co. un viaje a las profundidades del océano donde las anémonas son rubíes, los erizos brillan en diamantes y las sirenas llevan ópalos negros como tesoros.
“Blue Book 2025: Sea of Wonder es una expresión poética de transformación en la que la belleza del mar renace convertida en obras maestras contemporáneas”. —Nathalie Verdeille.
Formas orgánicas y fantásticas en el Blue Book 2025: Sea of Wonder de tiffany
Blue Book 2025: Sea of Wonder es una colección de 40 piezas inéditas en las que Nathalie Verdeille, Directora Artística de Joyería y Alta Joyería, reinterpreta de diseños de archivo de Jean Schlumberger (1907-1987), diseñador de Tiffany & Co. en 1956. Este nuevo capítulo en la marca profundiza los misterios del océano celebrando las fantásticas formas de la vida marina. Para inspirarse, Verdeille consultó los archivos de Jean Schlumberger y el resultado se categorizó en seis capítulos: Anchor, Anemone, Shell, Urchin, Mermaid y Ocean Flora. Cada uno evoca los enigmas del mar que Jean imaginó en joyas, pero que hoy, gracias a la creatividad de Nathalie, vemos con una perspectiva contemporánea.
Cada capítulo, una inspiración
Los capítulos en los que se dividió esta edición de la que es una de las colecciones de alta joyería más esperadas del año, responde —cada uno— a una inspiración distinta. En Anchor domina la geometría. Anemone, por el contrario, apuesta por el dinamismo y la fantasía. En Shell vemos la arquitectura orgánica del mar mientras Sirena apuesta por la absoluta fantasía. En Urchin las composiciones son más audaces y etéreas y, finalmente, en Ocean Flora que presenta una espectacular pieza única de alta relojería.
Alta Relojería en el océano
El capítulo Ocean Flora revela una creación excepcional de Alta Relojería: una pieza única que fusiona el refinamiento técnico con la poesía del mar. Su carátula de nácar refleja destellos cambiantes como olas en movimiento, mientras un marcador de turquesa en la posición de las doce horas evoca la pureza de las profundidades oceánicas. El brazalete, engastado con diamantes, retoma los códigos de la Alta Joyería de esta serie, transformando el tiempo en un tributo a la naturaleza y al arte más exquisito.
