Raíz de rubí rojo de Tanzania para la vitalidad y como protección. Sodalita azul profundo de Brasil para tener calma y claridad. Y la belleza verde de la malaquita de Zambia para el crecimiento y la transformación… Esto no es la receta de un hechizo aunque lo parezca, porque hablar de piedras siempre lleva al misticismo. Es, más bien, un listado breve de los significados simbólicos que, a lo largo de la historia, diversas culturas han atribuído a estas piedras cuya belleza es tan excepcional que, más que ornamentos, son consideradas talismanes con propiedades curativas, energéticas y hasta espirituales.


Relojes como talismanes
Con conocimiento de lo anterior —han trabajado con piedras naturales en sus relojes desde los 1960— y en plena celebración de los 150 años de la manufactura, Audemars Piguet presenta un trío de relojes donde suma, a los colores brillantes y la magia natural de las piedras, un espectacular tourbillon volante. Una complicación que suelen reservar para relojes más robustos.

Los Code 11.59 by Audemars Piguet Selfwinding Flying Tourbillon 38 mm llevan, por lo tanto, un calibre ultradelgado —el 2968— que, presentado por primera vez en 2022 con el Royal Oak RD#3 de 39 y luego 37 mm, permite que relojes de menos de 41 mm puedan llevar este prodigio técnico en las proporciones adecuadas. Así, se marca un nuevo estándar en temas de miniaturización y ergonomía. Para la firma de Le Brassus, esto —sumado a los materiales de las carátulas— dota a las piezas de “un peso emocional que hace de cada reloj tanto un talismán como una maravilla mecánica”.

Tres formas del Code 11.59 by Audemars Piguet Selfwinding Flying Tourbillon
A cada una de las tres referencias se le ha designado un metal distinto. Para la de sodalita azul, oro rosa; la de raíz de rubí se combina con oro blanco, y la de malaquita contrasta con el brillo del oro amarillo. Cada combinación ayuda a exaltar los colores de estas piedras y los detalles de sus vetas que hacen que cada carátula sea verdaderamente única. Y, como complemento, correas de aligátor van a juego. Esto con la posibilidad de intercambiarlas por otras de caucho para que sea fácil adaptar el reloj a cualquier actividad y momento del día. Pero también, por qué no, a cualquier género. Y es que, aunque el diámetro de 38 mm suele estar dedicado a las muñecas femeninas, toda persona que quiera llevar uno de estos espectaculares amuletos del tiempo, encontrará belleza y adaptabilidad en sus cómodas dimensiones.

FICHA TÉCNICA
Code 11.59 by Audemars Piguet Selfwinding Flying Tourbillon 38 mm